Puede que no hayas escuchado nunca esta palabra, pero es un hecho existente y que como abogados especialistas en divorcios nos encontramos muy a menudo. En los momentos de separación o divorcio los niños son los que más sufren y sin embargo son los únicos que no tienen ninguna culpa.

¿Cuál es el impacto en los niños en caso de divorcio?

El niño que por desgracia se encuentra en medio de la relación, puede verse envuelto cuando el psicólogo forense judicial, el Juez y/o el Ministerio Fiscal se tenga que entrevistar con él a solas. 

El testimonio del niño puede ser considerado como un testigo imparcial, sin ningún tipo de objetivo ni beneficio. 

Uno de los mayores problemas viene dado cuando no es tan sencillo como parece. A veces un niño se puede encontrar presuntamente manipulado por uno de sus padres, o incluso llegar a no sentirse libre a la hora de expresar sus opiniones, temiendo represalias posteriores en la convivencia. 

Siempre pensamos en el largo y duro proceso que conlleva para los padres, pero pocas veces se menciona el gran impacto emocional que puede llegar a tener para los niños. Donde en el peor de los casos pueden verse amenazados o coaccionados con tal de que su testimonio sea a favor de uno de los padres. Aquí es cuando podemos llegar a encontrarnos con una secuela muy grande en los hijos, el síndrome de alienación parental.

¿Qué es el síndrome de alienación parental?

El Síndrome de Alienación Parental en los niños, ocurre cuando se sienten coaccionados para que lleguen a sentir denigración hacia uno de los padres.

Este sentimiento  se suele iniciar mediante la instigación del temor, amenazas injustificadas, e injurias, que suelen producirse durante el largo proceso de divorcio por la custodia del niño o el régimen de visitas. 

En otras palabras, usar al niño para sentir en modo espejo lo mismo que un padre siente hacia el otro, que en caso de separación no consensuada suele ser bastante desagradable.

¿Cómo puede afectar a los niños un divorcio conflictivo?

Tal y como hemos visto anteriormente, una vez los padres se enfrentan y pierden el amor y el respeto, y usan a los niños para sus propios beneficios y objetivos para conseguir sus intereses ante el Juez. Intentando así impedir el derecho a régimen de visitas o aumentar la pensión de alimentos. 

Este tipo de conductas en adultos, incentivan o premian la conducta despectiva hacia el padre o la madre ya que así se sienten apoyados por sus hijos en el proceso de divorcio al ver que opinan igual que ellos, y que el desprecio hacía el otro padre es mutuo. 

Esto puede hacer que el menor no quiera volver a ver a esa persona, justificando el “daño” ocasionado a la madre o al padre. En los casos más graves incluso nos hemos encontrado con episodios violentos con faltas de respeto y odio, inculcados por uno de sus progenitores. 

Como abogados de familia en Alcoy, más de una vez nos hemos encontrado con algún caso de este tipo, al que por desgracia estamos acostumbrados a ver. Un padre usando al menor como “arma”. 

divorcio alcoy

Por desgracia los servicios públicos como el Punto de Encuentro Familiar o el Centro de Atención a la Infancia, son insuficientes para tratar este tipo de conflictos familiares.

Desde Gimeno Abogados recomendamos a todos aquellos padres que se encuentren en proceso de divorcio conflictivo, que intenten alejar en la medida de lo posible a los más pequeños de esta situación.

Como hemos visto tiene consecuencias irreparables y que pueden acabar en episodios de odio y violencia cuando este alcance la mayoría de edad. 

Gimeno Abogados somos especialistas en divorcios conflictivos, y como tal siempre evitamos incluir o meter a los más pequeños en procesos judiciales si es posible. Sabemos sus consecuencias y el duro trago emocional que eso les puede acarrear.